Criterio de intensidad en accidentes de tráfico
El proceso para reclamar una indemnización por accidentes de tráfico puede ser complicado y, en ocasiones, las compañías de seguros pueden denegar las reclamaciones. Esto puede suceder por diversos motivos, siendo uno de los más relevantes la velocidad al momento del accidente. Las aseguradoras a menudo evalúan si la velocidad de la colisión fue suficiente para provocar lesiones. Una velocidad escasa, puede ser entendida por la compañía de seguros como insuficiente para ocasionar lesiones.
La determinación de la velocidad a la que ocurre un accidente resulta una cuestión técnica, en la que intervienen peritos especializados tales como ingenieros biomecánicos.
Las pruebas obtenidas en la escena del accidente, como fotografías, marcas de neumáticos y la posición de los vehículos, son fundamentales, pero la principal prueba sobre la que se basan los estudios para determinar el criterio de intensidad del accidente son los daños materiales de ambos vehículos. En relación a los daños materiales manifestados por los vehículos, los ingenieros determinarán la velocidad transmitida al interior del habitáculo, así como si ésta es suficiente para ocasionar lesiones.
Evaluación de la Situación Legal
Ante la denegación de la indemnización por parte de la compañía de tráfico, es esencial evaluar la validez de esta decisión. Ley 35/2015, de 22 de septiembre, de reforma del sistema para la valoración de los daños y perjuicios causados a las personas en accidentes de circulación establece que los traumatismos cervicales menores que se diagnostican con base en la manifestación del lesionado sobre la existencia de dolor, y que no son susceptibles de verificación mediante pruebas médicas complementarias, se indemnizan como lesiones temporales, siempre que la naturaleza del hecho lesivo pueda producir el daño de acuerdo con los criterios de causalidad genérica, consistiendo el criterio de intensidad en la adecuación entre la lesión sufrida y el mecanismo de su producción, teniendo en cuenta la intensidad del accidente y las demás variables que afectan a la probabilidad de su existencia.
La definición legal no aborda con detalle los requisitos para establecer el criterio de intensidad, haciendo referencia a una adecuación entre la lesión y el mecanismo de su producción.
En la práctica, las compañías aseguradoras pueden desestimar estas reclamaciones cuando los daños de los vehículos resultan ser inferiores a 500 o 600 euros.
Opciones a Considerar: Negociación y demanda judicial.
En caso de denegación de la indemnización por este motivo, resulta necesario conocer el contenido de los informes técnicos que usa la compañía, así como el importe de los daños materiales valorados.
A pesar de esta actuación por parte de la compañía, la mayoría de resoluciones judiciales tienden a entender que, a pesar de que el accidente se haya producido a escasa velocidad, ello no impide que pueda provocar lesiones de gravedad, aunque sí es habitual ver cómo se limitan dichas lesiones. Resulta por todos conocido que ante pequeñas caídas pueden producirse graves daños personales, y en ocasiones, grandes caídas apenas provocan lesiones.
Una vez conocida la documentación que usa la compañía no es extraño conseguir un aumento de la indemnización previa negociación, o en su caso interposición de demanda judicial.
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